Los fracasados acuerdos de Minsk complican un alto el fuego entre Rusia y Ucrania

Bruselas/Kiev (Euractiv.com/.es) – Rusia bombardeó cinco regiones ucranianas pocas horas después de la -fracasada- «tregua de Pascua» anunciada por el presidente, Vladimir Putin, reviviendo así una especie de patrón reiterado en los acuerdos fallidos de alto el fuego, que ahora se cierne sobre la próxima ronda de conversaciones para intentar lograr una tregua, prevista para esta semana.

En ese sentido, está previsto que funcionarios estadounidenses, entre ellos el secretario de Estado Marco Rubio, los enviados especiales del presidente, Donald  Trump, Steve Witkoff y Keith Kellogg, y enviados de Ucrania, se reúnan el miércoles (23 de abril) en Londres con los ministros de Asuntos Exteriores y asesores de seguridad nacional de Francia, Alemania, Reino Unido y Ucrania.

Pero hay dos grandes obstáculos para avanzar en un acuerdo: Las exigencias maximalistas de Moscú, inaceptables para Kiev, y el largo historial de acuerdos de alto el fuego rotos desde que Rusia invadió Ucrania por primera vez en 2014.

El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, ha acusado a Rusia de violar 25 acuerdos de alto el fuego desde entonces.

La confianza se quebró hace una década, cuando Rusia violó en 2014 un acuerdo entre ambos países, firmado en 1997, que garantizaba el respeto de las fronteras y la integridad territorial.

La profunda desconfianza entre los dos vecinos se acentuó cuando se firmaron en 2014 los Acuerdos de Minsk, inicialmente auspiciados por la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) y posteriormente encabezados por Francia y Alemania, que luego también se incumplieron.

Ucrania amanece bajo ataques aéreos tras el cruce de acusaciones con Moscú sobre el «alto el fuego»

Las alertas antiaéreas sonaron en todo el Este de Ucrania y Kiev después de la medianoche del domingo y permanecieron activas durante toda la mañana de este lunes.

Los acuerdos de Minsk también se basaban en un marco de supervisión del alto el fuego débil y sin medios efectivos para vigilar el cumplimiento de la tregua por ambas partes.

Varios intentos de alto el fuego a corto plazo dentro de ese período -incluidas las sucesivas treguas de Pascua, Navidad y Año Nuevo entre 2016 y 2022- también fracasaron poco después de su firma, y Kiev acusó a Moscú de varias violaciones del acuerdo.

En anteriores ocasiones, Ucrania describió los acuerdos de Minsk como «trampa» que permitió a Moscú preparar la invasión de febrero de 2022.

Kiev considera que un acuerdo de alto el fuego carece de valor a menos que reciba garantías de seguridad occidentales que impidan un nuevo ataque ruso.

Esta vez también se plantea un problema clave en el aspecto operativo a la hora de verificar las denuncias de violaciones del alto el fuego: casi todos los medios y organizaciones independientes tienen prohibida la entrada en las zonas de Ucrania ocupadas por Rusia.

Propuesta estadounidense

Las conversaciones de esta semana son especialmente relevantes.

Son posteriores al alto el fuego de 30 horas que Putin decretó el 21 de abril, marcado por acusaciones de violaciones por ambas partes, y a la reunión de la semana pasada de funcionarios estadounidenses y europeos en París.

La reunión de París marcó un cambio en el planteamiento de la Casa Blanca sobre la mediación en la guerra, que hasta hace poco restó importancia a la participación de sus homólogos europeos en las negociaciones del alto el fuego.

Pero ahora Washington pierde la paciencia por la lentitud de los avances en los prolongados intentos de lograr un alto el fuego a largo plazo.

Zelenski acusa a Rusia de «fingir» una tregua temporal para la Pascua

Las fuerzas ucranianas informaron de 59 bombardeos y cinco intentos de asalto a primera hora del domingo, la mayoría a lo largo del frente oriental.

La semana pasada Rubio advirtió a Trump de que probablemente renunciaría a intentar negociar un acuerdo de paz entre Rusia y Ucrania «en cuestión de días», a menos que se produjeran señales claras de que es posible llegar a un acuerdo.

Cuando se reanudaron los combates, Trump se mostró más cauto y declaró:  «ojalá Rusia y Ucrania lleguen a un acuerdo esta semana», sin dar más detalles.

«Ambos empezarán entonces a hacer grandes negocios con Estados Unidos, que está prosperando, ¡y ganarán una fortuna!», aseguró el líder Republicano.

No obstante, es poco probable que prospere la última propuesta estadounidense, que congelaría la actual línea del frente, lo cual permitiría a Moscú hacerse de hecho con el control de la mayor parte del territorio ucraniano ahora bajo ocupación rusa y anularía para siempre las esperanzas de Ucrania de unirse a la OTAN.

Ucrania ha dicho en repetidas ocasiones que no cederá territorio a Rusia. Putin, por su parte, ha dejado claro que no está dispuesto a aceptar una tregua en toda regla hasta que se avance hacia un acuerdo de paz definitivo que satisfaga las exigencias de Rusia.

Putin anuncia un alto el fuego unilateral en Ucrania, pero Kiev afirma que siguen los combates

«Basándome en consideraciones humanitarias (…) ordeno el cese de todas las actividades militares durante este periodo», dijo Putin a su jefe militar, Valery Gerasimov, en una reunión en el Kremlin. Zelenski lo niega, y afirma que siguen los combates.

///

(Editado por Martina Monti/Euractiv.com y Fernando Heller/Euractiv.es)

The post Los fracasados acuerdos de Minsk complican un alto el fuego entre Rusia y Ucrania appeared first on Euractiv.es.