Ovidio Guzmán López, hijo del narcotraficante Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, se declaró culpable en Estados Unidos de cargos de narcotráfico, lavado de dinero y uso de armas. Su cooperación con la Justicia podría cambiar el rumbo de la lucha contra el Cártel de Sinaloa y evitarle una cadena perpetua.