Berlín (Euractiv.de/.es) – Cerca de las nueve y media de la noche en el día de la presentación en Bruselas del proyecto de presupuesto plurianual de la Unión Europea (UE), el 16 de julio, una comunicación urgente entró en las bandejas de correo electrónico de los corresponsales políticos en Berlín.
En exactamente 100 palabras, el portavoz jefe del Gobierno alemán, Stefan Kornelius, cargaba contra la propuesta de Bruselas, por un total de 2 billones de euros, para el Marco Financiero Plurianual (MFP) para el período 2028-2034, que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, presentó ese mismo día.
El plan de aumentar el presupuesto a largo plazo en casi dos tercios «no es vendible» en tiempos de consolidación presupuestaria, escribió, y añadió que Alemania tampoco «apoyaría» gravar a las empresas con un impuesto corporativo propuesto para toda la UE. En resumen: Berlín «no podrá aceptar la propuesta de la Comisión».
Posteriormente, incluso algunos aliados del canciller, Friedrich Merz (CDU/PPE), mostraron su sorpresa por el duro lenguaje que su equipo empleó contra el proyecto de Von der Leyen, compañera de filas de Merz en la CDU.
Fue el indicio más claro en las últimas semanas de que Merz está molesto con lo que considera «sordera» de Bruselas, sobre todo en cuestión de desregulación y competitividad, tal como sugieren fuentes cercanas a Berlín.
También ha dejado patente que empiezan a aflorar los conflictos de interés en la pareja con «más poder» de la UE.
¿Un trío de confianza?
En relación con el MFP, un alto cargo del gobierno alemán asegura que Von der Leyen tendría que haber sabido que un incremento tan fuerte del presupuesto comunitario y un nuevo impuesto de sociedades no eran opciones aceptables en Berlín.
En Berlín se percibía la tensión, sobre todo porque, según fuentes cercanas a la cancillería, Von der Leyen no informó sobre los pasajes más controvertidos de su propuesta.
La tensión ensombrece la relación entre ambos, que, inicialmente, se presentó como un buen ejemplo de coordinación entre Bruselas y Berlín.
Según indicó una fuente cercana a ambos políticos, mantuvieron un estrecho contacto durante los dos últimos años, a pesar de la especial cercanía de Von der Leyen con la ex canciller Angela Merkel (CDU), antigua rival de Merz.
Antes de las elecciones alemanas del pasado febrero, Merz prometió restaurar el liderazgo de Berlín en Europa y eliminar los obstáculos al crecimiento económico, que achacaba a Bruselas.
Sus esfuerzos tendrían que haber contado con el respaldo del eje del centro-derecha alemán, del cual también forma parte el líder del Partido Popular Europeo (PPE), Manfred Weber (CDU/CSU). Y en el periodo previo a las elecciones, ambas partes le siguieron el juego.
Cuando Von der Leyen necesitó el apoyo de Merz para ser nombrada candidata del PPE en las elecciones europeas de 2024, comenzó a recuperar su mantra político: menos microrregulación y más gran dirección.
En la campaña electoral alemana, sonrió cuando Merz la comprometió con un documento del PPE sobre la reducción de la burocracia en Bruselas, que apuntaba a algunas de sus políticas del primer mandato.
Roces en el congreso de Valencia
Sin embargo, en el congreso del PPE celebrado la pasada primavera en Valencia se ofrecieron las primeras pistas que señalaban a Merz como a un socio exigente con Von der Leyen.
En su discurso en Valencia, Merz apenas elogió su trayectoria. En su lugar, culpó a Bruselas de «molestar a la gente» con excesivas normas, prometió revisar la legislación ecológica que forma parte del legado del primer mandato de la alemana, y se mostró contrario al endurecimiento de las pruebas de seguridad para los vehículos privados.
Los delegados le aplaudieron, pero Von der Leyen no pareció muy satisfecha. Permaneció con los brazos cruzados y con los labios apretados. Su lenguaje corporal sugería que estaba «a punto de explotar», según comentó un funcionario del PPE, aunque otros compañeros de filas no compartieron esa impresión.
La burocracia de Bruselas
Merz y su gobierno de coalición con los socialdemócratas (SPD/S&D) parecen haber visto confirmados sus temores sobre las instituciones de la UE, según varios analistas.
Las primeras informaciones sobre el controvertido MFP de Bruselas se consideraron tan alejadas de la realidad -y de las limitaciones fiscales de la mayoría de los países europeos- que algunos funcionarios no los creyeron, en un principio.
Pero Merz también mostró su enfadó por las informaciones según las cuales Bruselas sopesaba aprobar normas para exigir que los nuevos coches de alquiler y de empresa fueran totalmente eléctricos a partir de 2030.
«Las propuestas (…) ignoran por completo las necesidades que tenemos actualmente en Europa (…) esas propuestas no son correctas», subrayó Marz.
Días antes se conoció una carta del canciller a Von der Leyen en la cual expresaba su «gran preocupación» por el Reglamento de Deforestación de la UE, que impondría nuevos deberes de información, incluso a los productos de los bosques alemanes, estrictamente regulados.
Las exenciones para «países de riesgo cero» como Alemania serían «una importante contribución al desmantelamiento de la burocracia», dijo Merz.
A diferencia de otros líderes de la UE, Merz se mostró satisfecho por el resultado de las negociaciones arancelarias con Estados Unidos, tras haber criticado inicialmente que los objetivos de negociación de la Comisión Europea eran «demasiado complicados» y amplios.
Problemas para Merz
Los funcionarios de Bruselas, por su parte, consideran que gran parte de todo eso es un problema de Merz.
Parece existir un amplio consenso entre los funcionarios de la UE acerca de que el gobierno alemán está descubriendo tardíamente que el bloque europeo es más complicado de manejar de lo que se imaginaba Merz, y que no es fácil doblegarse a la voluntad de Berlín, según una fuente oficial alemana.
Sin embargo, ambas partes establecen una línea clara diferenciadora entre divergencias políticas y relación personal de Merz y Von der Leyen, calificada de respetuosa.
En cualquier caso, los próximos dos años, según dijo Merz un día después de la presentación del MFP, «serán una dura batalla».
///
(mm)
The post ¿Merz contra Von der Leyen? primeras grietas en el tándem alemán con más poder de la UE appeared first on Euractiv.es.