Bruselas (Euractiv.com/.es) – La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen ha descartado acelerar la revisión del registro de lobbies de la Unión Europea (UE), según ha expuesto en una carta al Parlamento Europeo, tras el reciente escándalo por la presunta campaña de la multinacional tecnológica china Huawei para intentar influir en las decisiones de Bruselas.
En la misiva, a la cual he tenido acceso Euractiv, la presidenta de la Comisión responde a una petición formulada en marzo pasado por el foro informal anticorrupción del Parlamento, que instaba a Bruselas a poner en marcha esa revisión «con carácter de urgencia».
La petición se produjo después de que las autoridades belgas abrieran una investigación sobre una presunta trama de sobornos de Huawei en la que estaban implicados varios eurodiputados.
Sin embargo, en su respuesta, Von der Leyen no se compromete a ninguna revisión inmediata. En su lugar, afirma que la próxima revisión del registro de transparencia se debe contemplar como una «oportunidad» para evaluar si la herramienta cumple realmente sus objetivos.
«La Comisión está dispuesta a seguir debatiendo con el Parlamento y el Consejo en el contexto de ese proceso de revisión», escribió la alemana (CDU/PPE).
Aunque la revisión estaba prevista para este año, en virtud de un acuerdo interinstitucional, los eurodiputados advirtieron de que el registro de transparencia no ha logrado regular las embajadas y los grupos de presión no registrados, y con ello se han formado «lagunas en la supervisión».
En opinión de Von der Leyen, el registro de transparencia «no está diseñado ni es adecuado» para abordar actos delictivos como el soborno o el fraude.
En su carta, Von der Leyen también aclara que, si bien las embajadas y los diplomáticos de terceros países quedan fuera del ámbito de aplicación del registro, las entidades no diplomáticas que actúan en nombre de gobiernos extranjeros sí deben inscribirse.
A raíz de las revelaciones sobre el «escándalo Huawei», la Comisión recordó que ha dado instrucciones internas suspendiendo todas las reuniones y contactos con miembros o representantes de la empresa hasta nuevo aviso.
No obstante, no se ha disipado la inquietud sobre las lagunas jurídicas.
Euractiv informó hace pocos días de que Huawei ha seguido ejerciendo tareas de «lobby» en varios expedientes relacionados con la política energética de la UE, a pesar de la creciente presión para incluir a sus representantes en una lista negra.
En ese sentido, Daniel Freund, eurodiputado e integrante del grupo de lucha contra la corrupción del Parlamento Europeo, expresó su preocupación por las lagunas jurídicas que todavía pueden permitir a los grupos de presión vinculados a Huawei acceder a las instituciones de la UE.
En marzo pasado, Freund explicó a Euractiv que representantes o miembros de Huawei siguen teniendo acceso al Parlamento Europeo mediante pases de visitante o afiliándose a organizaciones ya inscritas en el registro de transparencia.
Desde mayo, el Parlamento Europeo ha endurecido las normas sobre los grupos de presión,y exige a todos ellos que registren su visita y activen las tarjetas de identificación.
En referencia a la respuesta de Von der Leyen, Freund señaló que no es «suficiente», al tiempo que añadió que también debería haber más transparencia sobre los grupos de presión de países no miembros de la UE.
Los eurodiputados cuestionaron también las posibles puertas giratorias o el movimiento de personas que pasan de la función pública al sector privado.
Pero en la carta, Bruselas asegura que desde 2018 ninguno de sus ex funcionarios ha notificado «una actividad posterior al servicio con Huawei dentro de los dos años posteriores a su salida (de Bruselas.»
La misiva especifica que el personal de la Comisión debe notificar a la institución cualquier nuevo empleo en los dos años siguientes al cese de su actividad en Bruselas.
Si ese nuevo cargo tiene algún vínculo con sus últimos tres años de servicio y plantea un conflicto potencial con los intereses de la Comisión, se puede vetar o aprobar con condiciones.
Aunque los altos funcionarios están sujetos a una prohibición estándar de ejercer actividades de lobby durante 12 meses, la Comisión puede imponer salvaguardias adicionales, desde restringir los contactos profesionales hasta limitar el alcance de las nuevas funciones para proteger la integridad institucional.
En relación con el hardware, Von der Leyen confirmó que el personal de la Comisión debe utilizar herramientas corporativas para asuntos oficiales y que Huawei no suministra ningún dispositivo móvil corporativo utilizado por el personal de Bruselas.
Por otra parte, Von der Leyen esboza en la carta nuevas medidas para reforzar la supervisión antifraude de la UE y la cooperación transfronteriza en materia de justicia penal.
«He encargado al Comisario de Justicia, Michael McGrath, que reflexione sobre los ámbitos en los que la Fiscalía Europea necesitará más competencias para investigar y perseguir los delitos transfronterizos», escribe la jefa de Bruselas.
Paralelamente, se ha encargado al Comisario de Presupuesto, Piotr Serafin, una revisión exhaustiva de la arquitectura antifraude de la UE con el fin de lograr «una cooperación y eficacia aún más estrechas» entre las instituciones, agrega.
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(Editado por Martina Monti/Euractiv.com y Fernando Heller/Euractiv.es)
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